UNA ODA A LA INFANCIA Y A LA NATURALEZA
Haize, una niña solitaria a la que le gusta deambular por la ciudad gris, descubre un invernadero abandonado al que vuelve todos los días a cuidar de esta jungla inesperada. Una tarde, un niño llamado Kimu aparece en su oasis improvisado para protegerse de la lluvia. Ambos niños plantarán, regarán, podarán y desherbarán sin descanso junto a otros para crear un refugio ideal.
¿POR QUÉ LEER EL PALACIO DE CRISTAL?
Hélène Druvert, con más de 1 000 000 de lectores, regresa con un precioso álbum.
Los troquelados láser, característicos de la autora, son espectaculares e inmersivos.
Un precioso álbum que defiende los lugares refugio y la exuberancia de la naturaleza.

